domingo, 14 de julio de 2024

...Motivos para VIAJAR, Motivos para VIVIR...(1)


Pero los verdaderos viajeros son los únicos que parten por partir;
corazones ligeros, semejantes a los globos.
De su fatalidad jamás ellos se apartan,
y, sin saber por qué, dicen siempre: ¡Vamos!

(Charles Baudelaire, Las flores del mal)

... leí hace años sobre sir Edmond Hillary que al ser preguntado por los motivos para escalar el Everest (fue en 1953, junto al sherpa Tensing Norgay, el primero en hollar la mítica cumbre, hoy tan pisoteada) contestó con un tan lacónico como expresivo ¡PORQUE ESTABA ALLÍ!...

...en esto de viajar, sobre todo en el viajar por viajar, cuando esta palabra resume motivo y resultado, incentivo y premio, pregunta y respuesta, objeto y objetivo, dicha pregunta, POR QUÉ VIAJAS, es talmente retórica, en sí misma queda contestada...

...Un par de semanas antes de partir para la ruta por Asia Central, un amigo, un buen amigo, antiguo compañero de latines y sotanas, un amigo hoy valedor en alguna desdicha si se presentase, velador de mí aunque nos veamos poco (yo, a todo el mundo veo poco) al decirle que partía en pocos días y que empezaba el periplo en Bakú, me preguntó que qué iba a hacer en Bakú, pregunta tan neutral en él como sorprendente en mí...pues, ¡ver Bakú!...fue mi respuesta, ampliada después por una serie de datos que adornaban la escueta respuesta, ampliándola al país mismo, AZERBAYÀN, y los que después vendrían, si no había novedad...como así fue: KAZAJISTÀN, KIRGUISTÁN Y TAYIKISTÁN.

Aquí dejo varias imágenes representativas de lo que pude visitar en cada país, complemento de las no pocas compartidas vía wasap...














¿Es menester partir? ¿Quedarse? Si te puedes quedar, quédate.
Parte, si es menester. Uno corre, el otro se oculta
para engañar ese enemigo vigilante y funesto,
¡El Tiempo! Él pertenece, a los corredores sin respiro...

(ídem anterior)


La vida es un libro y los que no viajaron leyeron solo una página...dijo Agustín, el santo obispo de Hipona. Ya lo cité tal cual en la página de arranque de este blog, en enero 2018, donde igualmente cité a modo de complementario, nunca de contrario, al Tao...
Sin salir por la puerta
se conoce el mundo.
Sin mirar por la ventana
se ve el camino del cielo.

Las dos caras sin las que no existe una moneda. Lo mismo diría de Marco Polo, y su par árabe Ibn Batuta, y el muy intrépido Alí Bey (Domingo Badía), que componen mi tríada viajera por excelencia, los tres, a una, en la misma cara, que se completa en su reverso con el insigne viajero en la estática, mi amado y sentido Fernando Pessoa (los viajes son los viajeros...)  . Me gustaría ser el imposible lugar de cita, de encuentro, de estas formas extremas y complementarias de vivir y vivenciar el profundo sentido de la palabra VIAJAR...















...¿por qué voy a tal o cual sitio?...porque estaba ahí, incluso diría yo que estaba aguardándome...¿por qué viajo?... Viajo para seguir viviendo, para redimirme de vivir, incluso, para no caer en otras tentaciones, para ponerme a prueba a mí mismo y sortearme, para seguir mereciéndome, para juntar historias que completen el imposible cuadro de la mía, para seguir descubriendo los entresijos del corazón del hombre, para, tantas veces, no tener más remedio que confiar en él, dejarme llevar (su ayuda, tantas veces lo comprobé, no es segura pero acaba por no fallar), para seguir constatando lo semejantes que somos en nuestras diferencias y tan diferentes en los parecidos, para seguir siendo ventana para los que me dijeron que lo fuera, para que el moho no haga capa en mí...Y porque es difícil estar en tu casa y no caer en la curiosidad de ver qué hay en la otra alcoba...La curiosidad es un destino...Y porque el camino más corto para llegar, al fin, a la casa que nos aguarda desde que echamos a rodar, pasa por mil  y un lugares...y, en fin, si la vida es un viaje (hacia la muerte, sin entrar en detalles) viajar es la manera más a propósito de vivirla...

Un buen viajero no tiene planes fijos ni la intención de llegar (Lao Tse)

(una página en honor del amigo que me preguntó que qué iba a hacer en Bakú) 

4 comentarios:

  1. Amigo don Antonio, no te haces idea, de los buenos ratos que me haces pasar, cada vez que publicas algo nuevo, pues comienzo asimilando poco a poco, y no sin un temor hacia lo desconocido, que me produce ansiedad de querer averiguar rápidamente todo lo publicado, pero me doy cuenta, que tengo que darle varios repasos, por que soy consciente que me queda mas de la mitad de la comida sin masticar, y es cuando realmente en cada posterior repaso disfruto... sin temor, y sin ansiedad de ningún tipo. Como siempre, no me queda otra opción que seguir dándote las gracias por tu labor desinteresada para con el resto de todas tus amistades. CON CARIÑO DESDE PONFERRADA - EL BIERZO - LEON - ESPAÑA.

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  2. César, amigo, tus palabras, leídas en Zaragoza, no hace sino dar aliento a mis ánimos. GRACIAS y un fuerte abrazo

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  3. Con esta página has abierto un tema filosófico y amplio, me gusta la primera foto, caminando en el aristero de la duna, en el desierto. Cuenta mucho este comienzo. Para tí vivir es viajar y estar en un sitio por estar en este sitio. En tus caminos encuentras tus motivos, profundizas tus impresiones, las conectas con otras, conoces a otra gente. Siempre me dejas con la imagen de haber vivenciado algo que te llenaba. Viajar significa despedirse de los hábitos, salir de la cinta de confort, entrar en lo incierto. Por eso el camino en el aristero con los abismos a dos lados... Tus viajes no son para relajarse, son casi expediciones, te exigen, te fatigan. En tus letras muchas veces leo algo de melancolía, de tristeza, viajar sirve para vaciar la mente (desierto), para distraerse, para encontrar consuelo. Te agradezco por tus palabras muy sinceras y entrañadas, te conozco y te entiendo. Viajar puede ser una fuga pero a pesar de viajar con equipaje ligero siempre te llevas contigo. En tu caso llegar podría ser otra aventura.....

    Un abrazo

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  4. ...nunca me consideré, amiga Ulrike, una persona alegre. En tiempos jóvenes mi timidez e incertidumbre me impidieron desbordar alegría y con el paso de los años comprendí que alegría o tristeza, y todo, no son más que expresiones de un momento...convengo, en que soy un ser triste pero pleno de humor, mi humor, claro. Y esa es mi ánimo viajero...no hay lugar tan lejano al que pueda llegar sin mi, desgraciadamente...

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