...SERGIO...

CUENTO DE UN HOMBRE Y UNA MUJER
Cuento de un hombre que se quería casar pero la mujer no se quería casar y tenían la fecha de la boda y la mujer no se quería casar porque el hombre era feo y por eso no se quería casar y estaba en un buen lío.
                                 

...Este es Sergio,  el autor del cuento que acaban de leer, cuento escrito en el curso 2005-06, y que relata, sin adornos ni florituras,  la triste historia de un hombre que se queda a las puertas del himeneo y sus delicias... 

Septiembre 2018...

…en estas idas y venidas por y entre las islas (Canarias, claro…) sigo caminando por donde caminaba, cierto que con un punto menos de energía pero con idéntica pasión por su paisaje, el paisaje, eso que definía un poeta o filósofo, o ambas cosas, como un estado del alma...y en concreto por el paisaje gomero  tantos años disfrutado, tantos años el mismo y siempre nuevo...
Por probar fuerzas y recuperar ánimo dije de volver a dar el paseo entre
La Dama y Arure, los dos lugares donde estuve de maestro, una caminata de unas cinco o seis, o siete, horas pasando por la playa de Iguala, el árbol, aún vivo, del Verodal, el trepidante barranco de Argaga, Valle Gran Rey, subir la Mérica, pasando junto a la ya mítica sabina (saludando a un par de botas de ésas que voy dejando al amparo de la geografía gomera...) y llegar a las Vegas de Arure...
Cierto que, como decía Phileas Fogg, lo imprevisto no existe, pero sí que era imprevisible el gratísimo encuentro que tuve... 
...Al pasar por el llano de Valle Gran Rey, mediada la mañana, al reclamo de un olor que me llegó, sentí el antojo de tomar café y churros así que me fui en derechura a la cafetería La Odisea de donde salía el tufillo...Cruzo el umbral y me topo frente por frente con Sergio, aquel niño de La Dama que formaba camarilla con Jerry y Yeray, un trío inovidable...Ahí los tenemos a los tres en el centro derecha del retrato...     

...¡Hombre, maestro!, ¡Hombre, Sergio!..Nos dimos un abrazo, yo me fui a una mesa y él siguió en sus quehaceres de camarero...Churros y café buenísimos pero ya mi atención se repartía entre los recuerdos del Sergio niño y sus actividades de camarero: alto, espigado, atento, educado, diligente, qué estilo llevando la bandeja entre la barra y la terraza...
Yo lo miraba y al mismo tiempo "veía" aquel espabilado niño, uno de los más inteligentes que tuve a mi cargo, y me acordaba de las muchas y sabrosas anécdotas a que dio lugar...Con su permiso aquí reflejo algunas de ellas sacadas de mis libretas, genuinas perlas cultivadas de la factoría Sergio, perlas hoy revalorizadas, lo mismo que varias fotos de aquel tiempo que se fue, como todo, por el gran sumidero del  Tiempo, el implacable... 
          

...Coincidimos en llevar pantalones de peto, y ahí estamos, 
tan formalicos los dos... 

...un día vino de visita el señor alcalde de Vallehermoso. Cuando se fue le pregunté a Sergio si él quería ser alcalde y él, entre enfadado y como diciendo "quita, hombre", me dijo que no...yo, un tanto sorprendido por la contundencia de su respuesta le pregunté los motivos y él, como ahuyentando una pesadilla, contestó..."porque yo no quiero ser gordo"¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ 

...y otro día, regresando de la feria de artesanía en San Sebastián, íbamos en la guagua y se me acercó y me confesó como un secretillo que él de mayor quería trabajar en una oficina "para ser rico"... 

...por lo pronto ya es un excelente camarero...

...En aquel curso 2005-06 me saqué de la manga un recurso que el tiempo convirtió en clásico,ciertamente exitoso...Y era que los niños, yo incluido, se fueran pintando mutuamente para ir haciendo una galería de retratos que íbamos colocando por las paredes de la jaula....Ni que decir tiene que salió de todo, desde verdaderos monstruos hasta parecidos inverosímiles... pero todos, todos, verdaderas obras de arte infantil. El retrato que Sergio hizo de un servidor no debió quedar muy del gusto de su autor porque el niño, pasando la mirada del retrato al modelo y viceversa, con el ceño fruncido, acabó diciendo:
 "Parece un desgraciao que no tiene dinero" ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

       

...Ahí estamos en Alojera cuando para el carnaval hicimos una  representación de la pasión de los gavilanes...

…una anécdota de peso, tanto por el contenido como porque tuvo un testigo de excepción: la inspectora Lola, que ese día estaba en La Dama de visita. Más que para contar es una anécdota para vivir en directo por lo espontáneo que surgió…Llegó la inspectora,digo, y estábamos conversando mientras los niños estaban con sus cosas, de acá pallá, por supuesto nada “atemorizados” por la visita, es más, diré que había más jaleo que de ordinario, que de todos es sabido que los niños suelen “lucirse” cuando hay visita…Lola,al parecer, preguntó que a qué solían jugar, no sé, el caso es que algún niño o niña dijo que jugaban a “Pasión de Gavilanes”, el culebrón que en aquel tiempo causaba furor. En este momento no tanto por interés sino por moderar la situación que empezaba a salirse de madre dije en voz suficientemente alta: 

"A ver, ¿cómo se juega a pasión de gavilanes?", y Sergio, que estaba jugando con sus compinches Jerry y Yeray, se volvió y con la mano en alto al estilo "yo lo sé", dijo: "CON MAYÚSCULA"...

                           Sergio leía mucho y contaba con gracia y detalle
todo lo que leía...                                                                       

 ...Jerry, Yeray y Sergio estaban, como siempre, en sus cosas.Al parecer tenían entre manos algo de números y cuentas y yo escuché cómo discutían. Al rato vino Sergio, muy resuelto,donde yo estaba, como portavoz del grupo, a consultar mi sabiduría y salir de dudas, y así riéndose como diciendo "mira qué disparate", me dijo..."Jerry dice que hay números hasta 30.000, ¿verdad que eso no es verdad?"...

...Aquí Sergio señala su nombre  en árabe escrito por mi amigo Imad que pasó unos días en La Dama... 

...Otro día fui nombrando las cosas que no tenía, cosas que no me hacían falta, y en broma dije a los niños que me las iba a comprar...Cité un coche, una casa, una televisión, un móvil...
"Y un pelo" añadió Sergio mirando mi despejada cabeza y completando la cesta de la supuesta compra...

Ahí están los tres hermanos: Kevin, el mayor (y dicho sea de paso el niño más desprendido de cuantos he tenido en las escuelas, todo lo prestaba, no tenía nada suyo) Sergio y Samuel...Acabo con una anécdota que afecta a los tres. Era finales de 2006 cuando nació Samuel, el pequeño,hoy el más alto de los tres. Para acostumbrar a los niños a empezar con mayúscula los nombres propios, le dije a Kevin que pusiera en la pizarra el nombre de su hermano recién nacido. Diligentemente puso Samuel..."Ahora, Kevin, pon los apellidos", le dije, y mirando a Sergio, como consultándole, contestó.."Todavía no me los sé"...
¡QUE LA VIDA LOS TRATE BIEN!

...muchas gracias, SERGIO, por el encuentro...

...si alguien está interesado en conocer más anécdotas  de Sergio sólo tiene que pedirlas más abajo...Si se juntan tres comentarios haré una segunda entrega...

Y si casualmente algún antiguo alumno se asomara a esta página y quisiera que publicara algunas fotos y anécdotas personales, no tiene nada más que pedirlo... 

Y en un más adelante de sabe Dios cuándo, dedicaré un post a los retratos que me sacaron los niños con sus pinceles...

Salud y que no falte humor para sacar adelante la vida...