...hay que buscar razones para consolarnos de lo inevitable...y así, me digo que una de las ventajas que tiene ser rico en ignorancia es que se encuentran con facilidad, por doquier, motivos y ocasiones para reducirla. Donde menos se espera salta la liebre, dice el sabio refranero. No menos cierto es que si estás atento, ojo avizor, es probable que veas más liebres de las que normalmente se ven. Esto fue, por ejemplo, lo que me ocurrió en origen con lo que ha devenido en esta página.
...iba en el ferry que hacía la ruta de Patras a Cefalonia e Ítaka. La mayor parte del pasaje se apeó (pongo esta palabra en agradecida deferencia a Gloria Fuertes, "apearse, no me gusta ese verbo" decía en Las tres reinas magas), digo, se bajó en el puerto de Sami, Cefalonia, quedando en el buque los cuatro gatos que apenas veinte minutos después nos bajamos en Pisaetos, Ítaca. En ese breve tiempo me senté frente a una de las grandes pantallas de televisión. Había una especie de magacín en el que a base de imágenes rápidas se iba haciendo un recorrido costero, saliendo fugazmente el nombre del lugar y algunas imágenes...me dio el tiempo justo a leer, en griego, el nombre del sitio, al tiempo, todo uno, que vi una imagen de alguien que no podía ser otro, al tiempo también que podía captar la palabra que aún en griego me sonó...y como digo, todo fugazmente. Ni lo pensé: aquello estaba preparado para mí, un positivo complot...busqué la palabra...Y ALLÍ ESTABA. Fui a pedir un café para pasar el buen trago, tenía la impresión de haber hecho un descubrimiento, de haber sido depositario de un regalo en exclusiva... ¡Y aquí está ahora para ser compartido!...
Si citara la palabra Naupacto, en griego Ναύπακτος, la mayoría la desconocería, puede que todos. Algo añadiría si dijera golfo de Corinto. Si además nombrara a don Miguel de Cervantes ya el cerco se estrecharía, y si completara con lo que él mismo proclamó como LA MÁS ALTA OCASIÓN QUE VIERON LOS SIGLOS...es obvio que estamos hablando de LEPANTO...
...Lepanto es como se llamó en italiano, y de paso en español, lo que en griego es Naupaktos; de hecho, cuando iba en el autobús desde Messolonghi, a la entrada de la población pude ver el cartel con ambos nombres: Ναύπακτος y Lepanto...
A pocos lugares (bueno, a muchos...) he llegado con tanta ilusión como aquí, pero casi nunca lo he hecho mediando tan poco tiempo entre conocer la existencia de un lugar y cumplir con él como si desde años lo hubiera estado esperando, que fue lo que me ocurrió, por ejemplo, en el cercano Messolonghi como ya he contado...por pocos lugares he sentido tanta gana de haber llegado sin saber que la tenía...diría que ha sido el destino estrella, por inesperado, de este mes por Grecia...
LA MÁS ALTA OCASIÓN QUE VIERON LOS SIGLOS PASADOS, LOS PRESENTES, NI ESPERAN VER LOS VENIDEROS, así dijo don Miguel...7 de octubre de 1571...fue el enfrentamiento entre la llamada Liga Santa y el Imperio Otomano, el Cristianismo y el Islam. La victoria de la Liga Santa fue de gran importancia en la historia de Europa y del Imperio Otomano, ya que marcó el punto de inflexión y declive de la expansión militar otomana en el Mediterráneo...
Batallas, que están en los libros, aparte, aquí dejo algunas de las tantas imágenes que tomé...
...desde los restos del castillo veneciano en la colina hasta el hoy encantador puertito al que se accede por una pequeña bocana entre dos muros almenados, a uno de cuyos lados se alza el "parque cultural" con esta estatua, perfecta fusión de personaje y escritor: cualquiera ve en ella al Caballero de la Triste Figura...
Después de la noche de lluvia lucía un día radiante, un paisaje en esplendor, una meridiana luz mediterrànea lo azulaba todo. Tras la primera visita de rigor, fui al hotel a dejar la mochila, y volví...había que sacarse un retrato, en los que raramente me pongo, fue cosa de empeño de la donosa camarera que me trajo el ouzo y los mezes...que compartí con el gato que nunca falta en Grecia.
... y volví de nuevo a la noche: aquello parecía un decorado medieval para una obra en la que solo había un espectador, errático y español para más señas...
Yota y Zacarías son los dueños del buen hotel donde me quedo, lástima que solo una noche. Hablan perfecto español tras haber trabajado 20 años en Madrid, en la cadena Meliá; regresaron a su país aprovechando la pandemia. Fue tan grato e interesante hablar con ellos...y mira por donde Zacarías y un servidor somos cocumpleañeros, nacimos el mismo día de octubre...Me despido de ellos y acto seguido hago lo propio con el encantador puertito de Lepanto y de don Miguel...
...le paso la mano por los escarpines, por los libros que hay entre ellos, tengo un recuerdo para las veces que leí el Quijote, (siempre el mismo, siempre otro, siempre más), para mi hermana y Milagros con las que viaje en bici por la Mancha aquel verano del 82, para mis alumnos de Hoz de Jaca con los que lo leí (mi alumna María Josefa me contó que el Quijote que le regalé lo guarda para su hijo, Ibón), igual que con mi amigo José Carlos y aquel buen viaje por la Mancha que siguió a su lectura, y de mi amigo Pepe Álvarez que con sus estudios y trabajos sobre autor y obra tanta luz y conocimiento me ha aportado...
Cervantes-Quijote es nuestra bandera cultural por el mundo, libro más traducido tras la Biblia, el único de España que no faltó en las casas museos de los escritores que visité, el encargado de salvar los muebles hispanos. Como dice Luis María Ansón...No parece exagerado afirmar que Miguel de Cervantes es el primer nombre de la entera Historia de España, por encima de Reyes, príncipes, poetas, dramaturgos, pintores, escultores, arquitectos, filósofos, políticos, religiosos, deportistas y otras gentes de varia condición...
"Ni la pobreza, ni el reconocimiento insuficiente de su obra, ni los problemas familiares, oscurecieron su ánimo" (Àngel Vivas).
"Hay algo en su literatura que es un alma pura; por mal que le hubiera tratado la vida", dice Andrés Trapiello.
...En muy poco tiempo, ni 24 horas, Naupaktos me ha generado un generosa ración de nostalgia...Echo a nadar camino de la estación de autobuses, la KTEL, algo alejada del casco urbano. Por el camino, me acerco a mirar las cuatro piedras que restan de lo que fue el templo de Asclepio, dios de la medicina, y su busto; cerca, el busto de Hesiodo, un poco más adelante, como prologando el nuevo destino, una estatua de corredor con antorcha olímpica (voy para Olimpia)...
Me sale al paso un cartel indicàndome la iglesia de san Jorge, Agios Giorgios, voy con tiempo sobrado y la escalinata no me arredra, así que la subo, y en buena hora: allí me encuentro esta vista de la ciudad, del golfo de Lepanto, al frente el Peloponeso, el increíble espectacular puente de Rio-Antirio junto a Patras, la iglesia y el necrotafio, el cementerio...Es en este momento en el que me vienen como musitadas al oìdo las palabras de Cervantes, resignadas, no desanimadas, animosas y humildes, premonitorias, escritas unos días antes de su partida:
"Ayer me dieron la extremaunción, y hoy escribo esta. El tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan, y, con todo esto, llevo la vida sobre el deseo que tengo de de vivir".
&&&&
El destino que nos lleva y nos trae, la casualidad...sea como se llame, quiere que venga a cerrar esta página sacada adelante a ratos encontrados, aprovechando lo prontura y largura de la noche, un par de semanas después de mi paso por los lares citados, y lo hago en plena Vía de la Plata, en cuyo camino voy, justo en el pueblo sevillano de Castilblanco de los Arroyos...a la entrada de la población se levanta un monumento en forma piramidal de planta cuadrada dedicado a nuestro don Miguel de Cervantes en agradecimiento por citarlo en su novela ejemplar "Las dos doncellas"...
Amigo Antonio, no sabes cómo te agradezco esta entrada, que parece inducida por humilde servidor, y que guardaré entre mis notas más queridas. Gracias amigo.
ResponderEliminarA lo largo de la obra de Cervantes hay repetidas muestras de la admiración de este por Juan de Austria. No parece el mismo caso respecto del rey, cuando, en el soneto al túmulo de Felipe II, advierte: “fuese y no hubo nada”, que da muestras de la indolencia que Pedro Insua apunta en Guerra y Paz en el Quijote, donde señala que más que un rey prudente fue un rey indolente, que le importaba muy poco la cristiandad, muy poco los cautivos de Argel, postura que sufrió Cervantes.
Juan de Austria, unas horas antes de la batalla de Lepanto, pronuncia estas palabras: “Hijos, a morir hemos venido, o a vencer si el cielo lo dispone. No deis ocasión para que el enemigo os pregunte con arrogancia impía ¿Dónde está vuestro Dios? Pelead en su santo nombre, porque muertos o victoriosos, habréis de alcanzar la inmortalidad".
La batalla de Lepanto es, en palabras de Cervantes escritas en el prólogo de las Novelas Ejemplares, "la más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros."
¿Qué puede significar todo esto?, ¿cómo analizar las palabras de Cervantes? El alcalaíno, para mi (ideas prestadas de otros como, Savater, Insua, Torrente, Rosales... que me seducen más que las palabras de Bataillón, Riley, Ortega…) es un racionalista declarado, precursor de la filosofía de Spinoza, con ideas claramente demostrables a lo largo de su obra: Cervantes se siente más cerca del cristianismo que del islamismo; es católico frente al protestantismo, y es escéptico, que no ateo, frente al cristianismo. Su racionalismo es manifiesto, sobre todo, en la muerte de don Quijote y en la suya: don Quijote, muere después de confesarse y de hacer testamento, cumpliendo con la iglesia y con el estado; Cervantes, a pesar de sus dudas y de su tibieza con la religión a lo largo de su vida, poco antes de morir, entra en la Venerable Orden Tercera de los franciscano; de esa forma se aseguraba el entierro.
Si importante fue para Europa que rusos y americanos, a mediados del siglo pasado, nos libraran del nazismo, no menos importancia tiene que en 1571, la Liga Santa, liderada por Juan de Austria, por España, librara a Europa del Islam. Descendamos al detalle más vulgar y más expresivo: si Europa, a finales del siglo XVI abraza el islamismo, quizás hoy los europeos rezaríamos mirando a meca, las mujeres irían tapadas hasta la cabeza, y obviamente nada de vino, nada de cerveza, nada de aperol, nada de jamón, nada de morcilla. Las conclusiones que cada uno saque las suyas.
Amigo Pepe...nunca un comentario ha superado con tantas creces el artículo que lo provoca...así, mi orgullo es haberlo provocado...te tuve ampliamente en cuenta en aquel bello rincón griego...
EliminarY todo confirma mi agradecimiento a tus estudios sobre la vida y obra de este gran hombre, nuestra verdadera bandera como españoles...y del devenir del tiempo, vamos camino de lo que dices
Un abrazo y gracias desde Zafra...
Amigo don Antonio... pues nada... que pasaba por aquí, y me entretuve un momento para disfrutar, y me gusto tanto, que mañana volveré, pasado también, y por supuesto más días. Te estoy tan agradecido, como sorprendido me tienes, osease: una burrada, que queda más fino que lo del infinito, porque lo del infinito, es como: un lavarse las manos, esto tiende al infinito... y ya está, coño... habrá que estudiar y esforzarse un poco más, y no disculpar la ignorancia. Bueno, solo pido que me entiendas un poquitín, y de paso, darte las gracias por tu esfuerzo dedicado a tus amistades. SALUD Y UN ABRAZO DESDE PONFERRADA - EL BIERZO - LEON - ESPAÑA.
ResponderEliminarAmigo César...yo creo que ya te quedado archimegasuperdemostrado la importancia del Quijote y Cervantes que, mira por donde, en la estatua de Grecia están fusionados...Contento de habértelo compartido, que para eso estoy, ando y viajo...
EliminarSalud y un abrazo
Tu página y el comentario interesantísimo de tu seguidor y amigo Don José Francisco me mostraron que Cervantes es mucho más de Don Quijote. Después de haber visitado su casa natal en Alcalá de Henares quise comprarme el Quijote en una librería local pero las 1500 páginas me detuvieron. Mi sabiduría de él es rudimentaria, todavía no he entendido su importancia para el mundo literario. Hay tantas cosas de aprender que una vida no es suficiente...me siento confrontada con mi propia ignorancia.
ResponderEliminarLepanto - me gusta mucho la foto de la entrada en el puerto con los restos del castillo, se habían encontrado un sitio perfecto para la estatua de Cervantes. No sé si su participación en la batalla entre media luna y cruz tenía importancia decisiva, pero me alegro del resultado. El resto se pierde en el horizonte....
¡Gracias Antonio!
Amiga Ulrike...en fin, qué quieres que te diga...yo solo puedo animarte a que un día te decidas y emprendas la tarea de leerlo...en novela actual tenemos el caso de nuestro Javier Marías con sus dos últimos libros, BERTA ISLA y NORMAN JEWINSON, son largos, anchos y profundos y a nosotros nos atraen en la misma manera que a otros les asusta tanta página...sobre el Quijote yo te recomendaría su lectura en alemán y te lo pusieras como tarea de una página por día...incluso, SI QUIERES, me comprometo a leerlo contigo, cada uno en su lugar, y acabar haciendo un pequeño gran viaje por la Mancha, como hice con mi mi amigo/alumno José Carlos...Creo que no puedo hacer más....¡Sea!
EliminarNo puedo estar más de acuerdo con el comienzo de esta página. Mi ignorancia unida a mi mala memoria me han deparado muchos momentos de alegría descubriendo cosas que no conocía y otras que había olvidado.
ResponderEliminarPor supuesto desconocía dónde estaba Lepanto... Lugares que se estudian pero que nunca busqué en el mapa... ¡Qué bonitas las fotos! Me gustan mucho también las citas de los distintos autores...
Hace tanto tiempo que leí el Quijote y las Novelas Ejemplares que debería volver a hacerlo. Tu página me incita a ello.
Toda mi admiración y mi agradecimiento, querido amigo.
...casi enlazo, amiga Mari Carmen, con lo que acabo de escribir para Ulrike. Yo he leído varias veces el Quijote y tengo la ancha sensación de que la próxima vez va a ser mucho más profunda mi vivencia...Cuando nos veamos, comentamos...
EliminarY menudo Sancho tú..... morador, dueño y señor de infinitas ínsulas baratarias....
ResponderEliminar...Harto agradezco tu comentario, tan escueto como profundo, además como testigo familiar...un abrazo desde Sexi, "aguantando el temporal" como cantaba Labordeta...
Eliminar