viernes, 14 de julio de 2023

...en el País de PEER GYNT...

...el dramaturgo noruego Henrik Ibsen, el mismo que escribió Casa de muñecas, sacó de su inspiración un personaje que ha pasado a ser entre popular y mitológico en la actual cultura noruega. Se trata de PEER GYNT, un poema romántico convertido en obra de teatro. Es una epopeya, una verdadera odisea que narra las andanzas de este hombre a través de sus edades, la evolución desde su aldea natal, sus impulsos juveniles, su picaresca, sus viajes... los múltiples avatares de su vida hasta su redencion final...vaya por delante mi decidida intención de leerlo, hace tiempo se lo debo...
La obra de lbsen por un lado, y la música de Edvard Grieg por otro, consiguieron la conjunción perfecta...horma y zapato...
Según contó la guía de la casa de Grieg, el músico no estaba animado para componer la, digamos, banda sonora, que le encargaba Ibsen, pero la motivación económica le acabó de convencer. ¡Y en buena hora!. Seguro que ni él podía sospechar la resonancia mundial que iba a tener su composición y que fuera a llegar a representar el espíritu de su país, una seña de identidad noruega...
Hago mi particular interpretación de esta música que por fortuna conozco y acompaño las conocidas ocho partes de las suites una y dos, tan populares, con recuerdos siempre presentes, cómo no, e imágenes de estos días por esta desbordante Naturaleza noruega...
LA MAÑANA
Los domingos nos regalaban una hora más de cama, y en lugar de los timbrazos de costumbre venía a sacarnos del sueño una música que llegaba por unos primitivos altavoces instalados en ambos extremos de los dormitorios, aquellos que llevaban los beatíficos nombres de la Inmaculada, de san Juan o san Luis, según la edad. Hablo, una vez más, de mis años de seminario, en la década de los 60 del pasado siglo...
Verano de 1974. Iba yo en un tren tranvía de Madrid-Atocha a Linares-Baeza. Tenía por vecino un soldado que marchaba con su petate camino de Cazorla. Podría ser un soldado raso pero me resultó un soldado ilustrado y nunca lo he olvidado por la de cosas que me dijo o contó y de las que recuerdo, atesorada, solo esta: después de tarareàrsela (entonces no había Shazam) él fue el que me dio santo y seña de aquella música que nos sacaba de la cama algunos domingos: era LA MAÑANA, movimiento primero de la suite de Peer Gynt, de Edward Grieg.
La mañana es así el primer pasaje de música clásica que se incorporó a mi vida. 
Aunque la historia para la que se compuso narra algo muy diferente (el personaje anda por Marruecos) esta diáfana pieza ha acabado por representar la pureza de un amanecer nórdico...y, enlazando con una de mis páginas anteriores, forma parte de la banda sonora que acompaña a Roth (Edward G. Robinson) en su despedida mientras mira con asombro el ensueño de los paisajes perdidos...Casualmente, Anne, mi gentil casera de uno de los hospedajes en Lysebotn, tenía puesta esta música el día que me iba de su casa...
LA MUERTE DE AASE
Aase es la madre de PEER GYNT. Me imagino a la pobre sufriendo en silencio las travesuras de su hijo y dándole consejos a la postre inútiles. Seguro le diria en noruego el equivalente a aquello que alguna vez me decía mi madre: "me vas a enterrar viva"... Justo estos días que escribo estas líneas ha muerto la madre de mi amigo Luis. Me cuenta que le preparó el desayuno, desayunando la dejó y, cuando regresó a las 11 para acompañarla en la misa por televisión, la encontró dormida...Ay, las madres...
             (recordado con cariño)
LA DANZA DE ANITRA
Vuelvo al seminario. Me deslumbro en la memoria cuando recuerdo los montajes teatrales que se hacían en aquellos tutelares muros, los espectaculares efectos que se conseguían contando con los escuetos medios que se tenían a mano, lo que daba de sí la imaginación, la creatividad, obra de curas cultísimos (el querido don Antonio Espigares, o nuestro gran don Germán, por ejemplo) y de alumnos mayores motivados y conocedores. Recuerdo singularmente el calderoniano auto sacramental de LA CENA DEL REY BALTASAR. ¡Cómo olvidar, por ejemplo, la manera en que aparecían en el decorado donde se desarrollaba la cena las inquitantes palabras (Mane, Tecel, Fares) que sentenciaban a Baltasar!...Antes, preparando dicho banquete, un servidor formaba parte de los sirvientes que, danzando, portaban en bandejas los manjares a la mesa del rey y sus invitados...y lo hacíamos al ritmo de este movimiento de Grieg.
(Mi compañero Juan Antonio me cuenta que tras la representación nos lanzamos a la captura de las frutas que iban en las bandejas...y que en una segunda representación, para gente de la calle, familias etc. las frutas eran de plástico...)
EN LA CAVERNA DEL REY DE LA MONTAÑA
...campos de Soria, donde las rocas sueñan...cantaba don Antonio Machado. Silentes campos de roca pura para provocar un sueño de ojos abiertos a quien los pasee. Mi recuerdo hacia Guadarrama y la Pedriza del Manzanares por un lado, el gallego monte Pindo por otro, y otros tantos lugares que no cito para no desviarme más, fue inmediato, estableciendo un telúrico parentesco.
Hablo del Geoparque MAGMA, cerca de Egersund, al sur de Stavanger, sudoeste de Noruega.
... Un abierto laberinto de lagunas, arroyos, bosque y masas rocosas bellamente hermanados...
Su roca estrella, su capricho, es el llamado TROLLPIKLEN, el pene del troll. Leí la historia, historieta, real historia, que tiene esta roca salida, de la que, dicho sea de paso, hay una similar, hermana, en La Gomera y otra, más humilde, en la costa de Almuñécar. Leí que hace unos años un grupo de paisanos de la comarca, harto conservadores, observaron la afrentosa forma de la roca, esa pujanza mineral, ese alarde, y decidieron cortar por lo sano...cómo lo harían, lo ignoro, pero echaron abajo ese callado priapismo...y así, ignoro también cómo, las autoridades repararon el agravio y ahí está, con el vigor recuperado (observad las costuras en la base)...
Me llamaron la atención las hierbas de algodón, ERIÓFORO, que no veía desde aquel viaje al Cabo Norte...buen escenario todo para el rey de la montaña y esa música épica tantas veces registrada...
EL RAPTO DE LA NOVIA
En la casa de Edvard Grieg había una copia de este cuadro que ya vi la pasada Navidad en el museo Nacional de Oslo. Se trata de Procesión Nupcial en Hardanger, considerada obra maestra del nacionalismo romántico noruego, pintada en 1848 al alimón por Adolph Tideman, que se encargó de los personajes, y Hans Gude, del paisaje...
DANZA ÁRABE 
A través de los wasap compartidos estos días he podido comprobar algo que acontece muy a menudo: que somos disfrutafores de unos contenidos, en este caso musical, sin conocer su autoría, que la música nos suena mucho y el autor no nos suena nada. Cierto que las ocho piezas de esta obra, unas en mayor medida que otras, han sido y seguirán siendo utilizadas como fondos sonoros en películas, series etc. Sin ir más lejos he escuchado La muerte de Aase, citada antes, como marcha de semana santa...
EL RETORNO DE PEER GYNT
... volví a Bergen, volví por un gusto centrado en dos motivos: ir de nuevo al albergue Montana, sito en la falda de la montaña Ulriken, albergue en el que ya me quedé en aquel lejano verano de 1991 cuando iba con Pandora 🚲 camino del Cabo Norte, y por visitar, ya por tercera vez, Troldhaugen, donde están los lugares que recuerdan a Edvard Grieg: la casa donde vivió varias décadas, el refugio estudio donde componía a orillas del lago, la piedra que sella la tumba que guarda sus cenizas y las de Nina, su mujer, musa y mejor intérprete de sus composiciones.
La historia de Grieg se me antoja como un caso a destacar: fue reconocido, admirado, laureado, querido y requerido en vida... pocos artistas han gozado de este privilegio. Cuando murió, la tarde de su entierro, cerraron los comercios de Bergen y decenas de miles de personas acompañaron sus restos.
...decía la guía que cada día, al finalizar su trabajo en esta casita, dejaba sobre el piano una nota en que decía que si alguien entrara a llevarse algo que por favor dejara las partituras, que para el probable ladrón no tenían valor alguno y sí mucho para él...
LA CANCION DE SOLVEIG
Con esta sentimental música concluye la suite. Suena a emotiva música de despedida, para acabar un día, o una vida, una música de adiós y obra cumplida, de agradecimiento, también de aceptación y resignación, de que todo, al fin, cuadró  y encuadró, música para ser escuchada mientras se va apagando el caleidoscopio que es, que fue, la vida. 
                           &&&&&
(Actores encarnando el papel de Peer Gynt)
Este paseo por las tierras de PEER GYNT se iba acabando. Ocurrió como siempre: cumplí con planes previstos, traté de disfrutar/amoldarme a los imprevistos (lo imprevisto no existe, decía Phileas Fogg ), y quedaron en proyecto otros, "para segunda orden" que diría mi madre...cierto que el tiempo y sus aliados corren en disfavor...
Cumplí con los tres lugares estrella del fiordo de Lyse, y con no poca suerte al contar con días despejados en medio de otros, la mayoría, de diluvio...
PREIKESTOLEN, el famoso púlpito, la piedra encajada de KJERAGBOLTEN y los 4444 ESCALONES de Flørli, los tres invitando al vértigo, al paciente esfuerzo, a la contemplación, al asombro, al regalo de sus paseos, a la maravilla...
Leo que solo se ha registrado una caída desde el púlpito, justo un español. Son casi 700 metros de caída, y casi mil desde la piedra encajada...

... pero venía a este paseo de varias semanas a Noruega con un propósito que apenas confidencié a un par de amigas...
Julio de 2013, hace 10 años justo en estos días. Iba andando el camino de san Olav, de alguna forma un equivalente al camino de Santiago. Partí de Oslo y tras casi 700 km llegué al destino: la catedral de Nídaros, nombre antiguo de Trondheim. Como a mitad de camino, en el lugar llamado Kvam, al término de esa etapa, fui a comprar algo de comer al supermercado Kiwi. Al ir a pagar constaté que mi cartera con dinero y documentos no aparecía por ningún lado. Dejé la mochila y desanduve unos kilómetros mientras en la memoria trataba de identificar el momento en que, tal vez ajustándome el pantalón, se me cayera. Nada. Esa noche, apenas unas horas de penumbra, la pasé tumbado en un lateral del tranquilo cementerio. Por la mañana, tal vez recordando aquello de que donde empieza el problema empieza también la solución me acerqué al camping allí al lado. Me atendió aquella mujer y en mi escaso inglés no exento de recursos le expliqué el caso. Manos a la obra: hizo unos cartelitos escritos en inglés y noruego que yo pegué en distintos sitios al tiempo que volvia a pasear por los últimos kilómetros preguntando a quien veía. Nada. La mujer me ofreció comida y una de las cabañas del camping, y llamar a la embajada española contando el caso,
y llamar por teléfono a uno de mis sobrinos para que me enviara dinero a wenster union. Al día siguiente ella me dio efectivo para el viaje en tren a Oslo donde fui muy bien atendido en la embajada y me proporcionaron un salvoconducto. Recuerdo a Constantino, y a Susana, con la que aún mantengo contacto, que me llevó al centro a recoger el dinero. Tomé el tren y regresé a Kvam, donde me esperaba ella. Dormí, no aceptó dinero, y tras sacarnos este retrato, seguí camino...
Live Ellen y yo tuvimos correspondencia por correo electrónico un par de años; no pudimos vernos cuando estuvo de vacaciones con su familia, marido e hijos, en la playa de las Américas de Tenerife estando yo en La Gomera. Después, sucesivos cambios de correo cortaron el contacto...
11 de julio, hoy. En tren de madrugada he llegado a Lillehammer. Sesteo como puedo en las escaleras de la estación. Con las primeras luces, antes de las cuatro de la mañana, salgo a las solitarias calles y encuentro con facilidad las señales del camino de san Olav, por aquí pasé. Escribo, leo y hago tiempo hasta las 12 que sale el tren que poco después de una hora me dejará en el lugar, Kvam. En llegando, en diez minutos estaré en el camping, Kirketeigen (lugar de la iglesia)..veo las cabañas, la recepción al fondo, qué me encontraré...
Rescaté para el probable encuentro, el momento emotivo del viaje, la vieja sudadera con el nudo celta que ya va tomando la vejez de su dueño, manteniendo lozanía por delante y descosturada por detrás...y llevo en el teléfono preparada la foto de entonces...
...en una de esas cabañas dormí aquella vez...
...Ya no trabaja aquí...los encargados de ahora no la conocen, contactan con el dueño enviàndoles la foto que muestro y creo entender que se marchó a otros lugares...mi gozo en un pozo...
Voy al supermercado Kiwi, compro algo de comer y una cerveza IPA y paso el día entre lluvia, frío, cementerio, leyendo y echando cabezadas sobre una mesa, Kvam no da para más. Por la noche tomaré el tren de regreso a Oslo. Hasta me consuela la frase de Pessoa que llevo en unos calcetines que me regaló Violeta: TODO VALE LA PENA CUANDO EL ALMA NO ES PEQUEÑA... Será...
Cerca de la la estación, allí sigue, impertérrito, jovial y picaruelo, ajeno al tiempo mortal, PEER GYNT...

lunes, 3 de julio de 2023

...4444...

...mi abuela Paz, abuelita Paz la llamàbamos, dio a luz a mi padre en una fábrica de luz, en las humildes dependencias de la fábrica de La Vega, que así se llamaba la central eléctrica encajada en una angostura del río Monachil ya cerca del espectacular paraje de Los Cachorros, muy cerca de Monachil. Y así se sigue llamando tras haberse puesto de nuevo en marcha después de bastantes años de abandono. Allí vivía la familia, pues mi abuelo Ulpiano trabajaba en dicha central. Un día -mi padre tenía a la sazón unos ocho años- a mi abuelo se le ocurrió morirse, el pobre, y mi pobre abuela tuvo que salir del lugar con su no pequeña prole, camino de Monachil, a buscarse la vida...apenas guardo un par de fragmentadas historias: lamento profundamente, siempre, no haber hablado con mi padre, haberle preguntado, sonsacado, recuerdos de su infancia, su mocedad, todo, historias ya  irrecuperables, frustraciones íntimas con las que uno va por la vida 🤦‍♂️🤦‍♂️🤦‍♂️...(buena parte de ello, incluido el lugar de nacimiento, lo traté páginas atrás en una dedicada a mi padre).
En ese tiempo del parto que salió mi padre, andaba el mundo liado en lo que se llamó primera guerra mundial...y estaba en plena construcción esta central eléctrica de Flørli, sito a orillas del fiordo Lyse, como en su mitad. Hablo de la provincia de Rogaland con capital en Stavanger, hablo del sur de Noruega...
Unas 54 horas pasé en este lugar, dos noches sin apenas oscuridad al resguardo de esta monumental tienda de campaña que me ofreció como alojamiento, vía Booking, el amigo Hessel...
...y, como en tantos otros lugares, he sentido en dos días el paso de una vida, acunado entre naturaleza, soledades, recuerdos y conexiones con otros tantos sitios por los que pasé... Flørli, un lugar al que solo se llega en barco o andando, otro lugar más, nunca uno más, que se coloca en mi personal mapa errante...
Igual que conozco gran cantidad de lugares, todos me interesan, a los que no iré, igualmente ignoro lugares que estaban ahí, en los mapas, en algún libro, por ejemplo, agazapados, y que al llegar a los sitios parecen estar esperándome, y hasta recibirme y decirme aquí estábamos y tú tan ignorante...así, la nombrada escalera de madera más larga del mundo salió a mi encuentro en la oficina de turismo de Stavanger...y no quedaba más remedio que incluirla tras mi paso, al fin, por el famoso púlpito noruego (Preikestolen), sito en el mismo fiordo y, desde luego, destino estrella del mismo.

...en lo que antaño era la central, ese gran edificio blanco con que abro la página, hoy, no sin esfuerzos ni batallas (el desmantelamiento, el destruir, suele ser la primera idea de los que mandan, aquí también...) se abre un hospedaje, pequeña tienda, se sirve café, comidas...todo con un exquisito gusto vintage...
...y, sobre todo, alberga una exposición/museo que mantiene viva la historia tanto de la construcción de la central como del pequeño núcleo de población de Flørli...
Aparte de las amables explicaciones de Hessel, me serví del traductor del teléfono para enterarme de todo lo que se exhibía.
...como en tantos sitios ¡qué trabajicos tuvieron que pasar!...
En 1999 cerró su actividad siendo sustituida por otra acorde los tiempos: puede verse a la izquierda en la maqueta de abajo cómo un túnel atraviesa la montaña etc etc....
Hoy, como en tantos lugares del mundo, como con casi todo, el turismo ha venido al rescate de lugares como Flørli. Y, entre otros atractivos naturales, su reclamo es, sin duda, las famosas escaleras...

Son 740 metros la altitud que ganan desde la orilla del fiordo hasta la pequeña presa desde donde el agua se precipitaba tuberías abajo para mover las turbinas en ese proceso generador de energía.
Las caminé en solitario a una hora temprana, comprobando resignado, nada me cuesta reconocerlo, cómo mi rendimiento corazonal va en declive, motivos no le faltan...
Entre tomar aliento y recuperar resuello iba contemplando, asombrado, la colosal obra que acometieron en aquellos años, entre 1.917 y 1.919, ensamblando piedra, madera y metal en un terreno tan abrupto, ciertamente una obra portentosa, como me parecen todas las que sobrepasan mis menguadas capacidades: todas me causan admiración y renuevan mi tantas veces tambaleante fe en este ser humano capaz desde la más antigua antigüedad de levantar grandiosas obras... Ímprobos esfuerzos, sangre, sudor y lágrimas pude leer en uno de los paneles...
Valgan estas escalonadas imágenes:

...y desde arriba, disfrutando de unas horas de sol entre tantos días de lluvia...

La bajada, más larga y reposada, más cómoda, te lleva por pleno bosque y te permite pasar junto a impresionantes caídas de agua por una senda no exenta de escaleras, ya ensamblaje moderno...

Volviendo a Flørli...Hessel es un hombre holandés, uno de los voluntarios que se involucró en el mantenimiento de las instalaciones de la central y del propio asentamiento. Fue muy amable y paciente conmigo. Me contó muchas cosas interesantes y lo hizo en un empeñoso español que harto agradecí, español que aprendió en sus periódicas estancias en España: Ronda, Tarifa, Denia, Granada -citó el Albayzin y el mirador de san Nicolás-...me dijo que en los salones disponibles vienen de vez en cuando grupos de presos a pasar el día, a comer, tratar de negocios...ante mi extrañeza, le puse las manos en posición esposada...¿presos?...¡quería decir empresarios! ...dice que no tiene subsidio (subvención) alguna y que tomó el lugar por diez años y le quedan tres. Las seis o siete casas, no más, que hay en el "pueblo", son hospedajes, tipo albergue, más un par de ellos "con encanto"...
Forma parte de los mismos el edificio de la propia escuela, donde pasé buenas horas leyendo, y estando, sin más...es este edificio rojo...
La escuela cerró en 1984 (yo andaba en escuela similar en Hoz de Jaca). Me recordó por espacio y tiempo aquella de Okarito, isla sur de Nueva Zelanda, también albergue...
En la exposición del edificio de la central hay igualmente fotos de la vida de entonces...
...estos infantes están en el puente justo delante de la central...miro estas fotos, como en otros museos o lugares, con veneración, e inevitablemente siempre pienso: ya no vive ninguno, todos han muerto, todos se fueron al silencio, todos vinieron, gustaron los sabores y sinsabores de la vida, cada uno como quiso o como pudo, y se marcharon... todos momentáneamente rescatados por mi mirada...
...y por supuesto no faltan retratos de aquellos niños y aquellos abnegados maestros...
 Provocadora de recuerdos personales y entrañable esta foto del maestro, tal vez con él se cerró la escuela, yendo con toda la clase de viaje fin de curso a Oslo...

3 de julio, en Lysebotn, cabecera del fiordo. No paró de llover en todo el día y la temperatura apenas rebasó los 10°. La forzosa invitación al recogimiento me permitió construir esta pagina que cierro volviendo al principio: hermanando  aquella humilde fábrica de luz donde nació mi padre con esta a cuya historia y paisaje me he acercado...la vida...