...cuando allá por el pasado enero empezaba a tomar visos de realidad este viaje a Indochina que ya va concluyendo (ya concluido cuando publico este rimero de fotos y letras que dejé en borrador) uno de los tantos puntos que consulté, como siempre hago, fue el de las cumbres más altas de cada país. La de Vietnam era, es, además, la cima más alta de esta península indochina que conforma junto a Tailandia, Camboya y Laos.
Me puse a mirar formas de acceder a ella. Lo propio para mí sería, todavía lo es, acceder a pie, ganando altura paso a paso y volver a sentir lo que se siente, a saber cada cual, cuando tras un esfuerzo de mayor o menor calibre, llegas donde ya no se puede seguir subiendo...pero, por lo que leí, parecía preceptivo ir en un trekking organizado de varios días etc. Renuente como soy a grupos, a su disciplina, yo, tan disciplinado como díscolo, tuve fácil resignar, no me costó nada, y subí como la mayoría: en el teleférico, experiencia en nada desmerecedora, harto al contrario.
Fuera como fuese y tras haber estado allí, visitar la cumbre del FANSIPAN yo lo situaría entre lo imprescindible de un viaje a Vietnam...
La tarde previa a la subida, la tarde del día que llegué al muy turístico SA PA, paseé y subí a la montaña y parque Ham Rong, anejo a la propia ciudad....el día, que estuvo todo tonteando entre nubes altas y bajas, se despidió de lujo abriendo a la vista el paisaje completo de estas montañas. Entonces pude localizar a placer lo que había entrevisto antes y situado gracias a la inestimable ayuda del chico de la recepción, un amabilísimo muchacho, Za, 25 años, con el que, por supuesto, mantengo wasap (en los días de Vietnam, cuando le he enviado fotos de Hué, Hoi An, Ha Long... su respuesta junto con su agradecimiento, es la misma: "espero ir en un futuro")...este es el ángulo superior izquierdo de la foto anterior...
Un funicular primero, saliendo del mismo centro de Sa Pa, en el grandioso edificio herencia francesa, te lleva al parque, primoroso entre figuras y jardines, de donde parte el teleférico.
...el gran Buda Amitahba, de 21,50 m. en cuyo interior se guardan reliquias...
...la obra erigida en la montaña, ya de por sí grandiosa, toma dimensiones colosales si se tiene en cuenta que no hay carretera alguna que lleve a la cumbre...El majestuoso enclave que hoy se disfruta...(todo lo que va en cejilla es traducción de los paneles que había)...es el resultado de un arduo trabajo de 800 días con sus noches, cientos de trabajadores transportando los materiales, muchas veces en condiciones climáticas y topográficas extremas. Fansipan es un símbolo de fortaleza e inteligencia vietnamita...
Desde la estación superior del teleférico hay una serie de pasarelas y tramos de escaleras (unos 600 peldaños), y templos donde reposar y contemplar su espléndido interior (y renovar la pena de no saber nada de lo que está escrito, del devoto significado de todo, aunque solo fuera un poco de casi todo...).
Vale, y mucho, la pena hacer el tramo andando, despacio, contemplando tanto detalle. Aún así, hay un funicular que cubre el tramo final...
... así gané la cumbre, compartiendo a solas los festejos de la gente que llegaba y se sacaba los preceptivos retratos con unas banderas de Vietnam allí dispuestas para este fin...
...no es fácil imaginar cómo sería el inicio y los primeros tiempos de esta colosal obra...la cantidad de obreros haciendo desmontes en la jungla casi impenetrable, trazando unas primeras sendas salvando fuertes desniveles, transportando los primeros materiales..Za, el amigo recepcionista citado, me ha enviado información y algunas fotos relativas a la construcción de esta magna obra en la cumbre de Fansipan. Me cuenta que en los primeros tiempos todo se fue ganando a lomos de animales y arduos trabajos de gran cantidad de obreros...así hasta que se puedo tender el primer cable.
...transportaron cien mil toneladas de piedra, dos mil metros cúbicos de madera, miles de ladrillos, scos de cemento, rollos de cuerda, de cables...subieron a través de la jungla, cruzaron montañas, llegaron a la cima de Fansipan usando las manos, las tablas para trepar y los hombros de ingenieros y trabajadores...valiente, resistente, persistente y fuerte.
...así hasta conseguir tender el primer cable, que ya facilitó todo...
La obra comenzó en octubre de 2014
y el lugar se inauguró el 30 de enero de 2018...
...así se comprenderá que me costó trabajo marchar del lugar. Pasé siete horas deambulando por sus templos, sus escaleras, sus pasarelas, contemplando lo mismo desde diversos ángulos, el asombroso espectáculo de las montañas que aparecían y desaparecían al danzar de la nubes...Fue uno de los concretos lugares de la geografía mundial que conozco que más me costó abandonar, me sentía atrapado. Y fue el 26 de marzo, como para celebrar una fecha marcada en mi vida, una efemérides que se mantiene firme al paso del tiempo...
En la estación del teleférico había una cumplida exposición de fotos del sagrado lugar bajo distintas luces en tiempos diferentes, excelente complemento de estas imágenes que yo tuve...