jueves, 13 de agosto de 2020

...EL CEMENTERIO DE LOS INGLESES...

...parece fuera de duda que San Sebastián es una ciudad elegante, atractiva...No faltan motivos que lo confirmen ni me los faltan a mí para, en este vagabundeo en el que voy, volver a estos lares tantos años después (me parece que la última vez fue cuando corrí su animosa maratón en uno de los años 90, cuando corría "que me las pelaba"...
Además de lo que podría encuadrarse bajo el inconcreto epígrafe de "y lo que surja", varios motivos concretos me han traído a la Bella Easo, y entre ellos dos: la tumba de la insigne Clara Campoamor y el llamado cementerio de los ingleses...
Son curiosas, variopintas, las maneras por las que llegamos, podemos acceder, al conocimiento de algo... Pese a lo triste que me pareció en su momento, destaco la forma como conocí este lugar donostiarra...
Fue la madre de mi querido, gracioso y educado, alumno Jerry Javier, de La Gomera, la que al saludarla hace unos años me dijo que si quería llevarme unos libros que Jerry "había tenido que leer" en la ESO...Servidor, ante la perspectiva de verlos abandonados junto a un contenedor, o directamente tirados a...(ya nadie quiere libros y son ellos de lo primero que se deshace la mayoría a la hora de las limpiezas...) me los llevé....y entre ellos estaba el que, mira por donde, iba a dar lugar a esta página, uno de esos libros que tienen que leerse los adolescentes y que raramente logran prender la llama por la curiosidad lectora...me valgo de internet para colocar la portada...
...nada tiene que ver esta estatuaria y su paisaje con el verdadero cementerio que ambienta el libro, libro que no he leído y que no sé si un día...
A la derecha, rematado por el gigantesco Corazón de Jesús que corona el castillo de La Mota, podéis ver el monte Urgull, una de las señas de identidad que enmarcan la remarcable playa de la Concha...
El cementerio cae justo en la otra cara.






Sus tumbas, las que hay o quedan, emergen, no muy visibles, entre la tupida vegetación que las ampara y que acabará, quién sabe, devorándolas...el lugar tiene un inusitado encanto, un incuestionable embrujo...solitario, silencioso, permite un nostálgico paseo bajo aquellas frondas...hablando con propiedad, no son tumbas como tal, es decir, no hay restos bajo ellas, o a saber, son los monumentos funerarios que se erigieron en recuerdo de aquellos ingleses que...(vuelvo a echar mano de google)...
...Inaugurado el 28 de septiembre de 1924. En la obra se pueden leer dos inscripciones. En la parte alta "IN MEMORY / OF THE GALLANT BRITISH SOLDIERS / WHO GAVE THEIR OWN COUNTRY / AND FOR INDEPENCE / AND LIBERTY OF SPAIN. A LA MEMORIA / DE LOS / VALIENTES SOLDADOS BRITANICOS / QUE DIERON LA VIDA / POR LA GRANDEZA DE SU PAIS / Y POR LA INDEPENDENCIA / Y LA LIBERTAD DE ESPAÑA" En la parte baja "INGLATERRA NOS CONFIA SUS GLORIOSOS RESTOS / NUESTRA GRATITUD VELARÁ SU ETERNO REPOSO. ENGLAND HAS CONFERED TO US THEIR HONORRED REMAINS / OUR GRATITUDE WILL WATCH OVER THEIR ETERNAL REPOSED". Para la realización de esta obra se reutilizaron parte de las figuras (las de la batalla y los soldados) del Monumento Conmemorativo del Centenario de 1813.  


DIEU ET MON DROIT/DIOS Y MI DERECHO 
(lema de la monarquía británica) 
(sigo con internet)

En la desprotegida ladera norte del monte Urgull de San Sebastián, enfrentada con las mareas vivas del Cantábrico, el Cementerio de los Ingleses conserva los restos mortales de algunos oficiales y soldados de la Legión Auxiliar Británica caídos en suelo guipuzcoano durante la primera guerra carlista. Esa unidad de voluntarios, enviada a España en 1835 al mando el general George Lacy Evans (un veterano de las guerras napoleónicas que había combatido en Waterloo) en ayuda del Gobierno amenazado por la sublevación del pretendiente, se batió con bravura en marzo de 1837 contra las tropas del infante don Sebastián en el cerro de Oriamendi; según una leyenda, la música del célebre himno que lleva el nombre de esa batalla, ganada por los carlistas, procede de una partitura encontrada en la mochila de un británico fallecido en la pelea. Cercana al monumento erigido en ese bello cementerio marino como homenaje a "los héroes que sólo Dios conoce" se halla también la tumba del mariscal de campo español Manuel Gurrea, un héroe de la batalla de Luchana y amigo de Espartero muerto en los campos de Andoain el 29 de mayo de 1837.La sublevación de 1833 de los partidarios de don Carlos María Isidro en defensa de la legitimidad dinástica, el régimen absolutista y el altar frente a la Reina Gobernadora fue el origen de la primera guerra civil librada entre españoles (entre vascos, en particular). Después de la segunda y la tercera carlistadas, que pretendieron sentar en el trono al conde de Montemolín y al duque de Madrid respectivamente, el decisivo papel jugado por los requetés navarros y vascos en la sublevación de 1936 otorgó a nuestra última contienda fratricida los aires de una cuarta guerra carlista. Por lo demás, la Legión Auxiliar Británica no sería la primera fuerza extranjera voluntaria que acudió a España para luchar por la libertad y el régimen legalmente constituido. La reciente visita de los octogenarios supervivientes de las Brigadas Internacionales, tan gélidamente acogidos por el Gobierno y las demás autoridades del PP, ha servido para recordar la generosa contribución a la defensa de la República realizada por 50.000 voluntarios procedentes de Estados Unidos, América Latina y Europa, miles de los cuales yacen para siempre en nuestro suelo.



...Supongo que la pérfida Albión tendría algunos intereses en juego... 

...Hay otro Cementerio de los Ingleses en la gallega costa da morte...tal vez otro día...lo mismo que la tumba de Clara Campoamor y otras que encontré en el monumental cementerio de Polloe...